La planta de upgrading de Granollers se incorpora al sistema GDO (Garantías de Origen de Gases Renovables)

La planta de upgrading de Granollers se incorpora al sistema GDO (Garantías de Origen de Gases Renovables)

La planta de upgrading de Granollers sigue sumando certificaciones. Ahora hemos conseguido incorporarnos al sistema GDO (Garantías de Origen de Gases Renovables), en el que, actualmente, sólo hay una quincena de centros de producción. Se trata de un certificado que acredita el carácter renovable de la energía (en este caso biogás) y aporta información detallada sobre el proceso de producción. Este es un certificado electrónico sobre: origen, tipo de producción, tipo de producto, fabricante, cuando se emite o cancela la garantía de origen.

Su función es demostrar al consumidor final que una determinada cuota o cantidad de energía se ha obtenido a partir de fuentes renovables. Las GdO son un sistema que no permite duplicar, ni revender “certificados” renovables. El objetivo es tener un sistema garantista que permite protege a las entidades que invierten en productos sostenibles frente a malas prácticas. 

Para obtenerla es necesario cumplir con lo establecido en Real Decreto 376/2022. En dicho decreto se establecen las condiciones que han de cumplirse en relación con emisiones, tipo de producción, sostenibilidad; y otros factores.

La planta de upgrading de Granollers forma parte del proyecto BioVo cuyo objetivo es la generación de biometano a través del aprovechamiento del biogás que se genera en los procesos de tratamiento en la Planta de Digestión Anaeróbica y de Compostaje del Consorci per a la Gestión dels Residuos del Vallès Oriental y en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Granollers del Consorci Besòs Tordera.

La instalación cuenta con una planta de limpieza y purificación de biogás, mediante la tecnología de membranas de Bright Renewables; un gasómetro con capacidad para 1.250 m3 y un módulo de inyección de biometano en la red de Nedgia. El proyecto utiliza el biogás procedente de las instalaciones de la EDAR y la planta de gestión de residuos orgánicos procedentes de la recogida selectiva, estimado ahora en 661.036 Nm3 /año y que podría alcanzar los 3,26 millones de Nm3/año.

El proyecto, con un coste previsto de 2,8 millones de euros, ha recibido una subvención de 1,01 millones euros por parte del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) a través de los Fondos Europeos de Desarrollo Regional de la Unión Europea (FEDER) al tratarse de una iniciativa que favorece una economía baja en carbono y, por tanto, un crecimiento sostenible. El resto va a cargo de los dos consorcios.